Una desagradable cadena de hechos volvió a demostrar algo que, en Tigre, no es más secreto: el abusivo accionar del Centro de Operaciones local, más conocido como COT, una especie de Policía paralela que tiene el massismo.
En este caso, un oficial de tránsito tuvo un altercado con una mujer en la localidad de Ricardo Rojas, que fue filmado por la propia protagonista. El agente llamó a la central para pedir refuerzos y, minutos después, llegó otro móvil del COT junto a otro de la Policía Bonaerense para reforzar su presencia en un lugar donde -en apariencia- no hacía falta.
Otro vecino del lugar, alertado por el problema, decidió filmar lo que estaba pasando. Los agentes increparon a este último que no se achicó, respondió y ahí comenzó un duro cruce: los policías agredieron a su madre, tiraron la puerta de su casa abajo -cosa que está prohibida sin una orden y algo que ellos recordaron en ese instante- y dispararon con armas de fuego, hiriendo a dos menores. El sobrino del primero y su hermana, de 16 años.
El joven, de nombre Cristian, dialogó con Buenos Aires 2punto0 Formato Radio y aportó las precisiones de lo ocurrido, punto por punto. "El Día de la Madre estaba en la puerta de mi casa festejando, como en cualquier día normal. Viene un móvil del COT y se frena en mi casa, no sé que le decían a una piba; la cuestión es que yo saco el celular y el policía me dice "Me parece que a vos te gustan los bifes, ¿no?". Me dijeron "La concha de tu madre", yo le respondí, está todo grabado. El del móvil les hace seña para que entren a mi casa, yo me meto en el portón y mi mamá se mete en el medio", alertó.
"Yo hace unos años atrás salí de testigo por unos muchachos a los que les querían cobrar coimas. Desde ese día, no me dejan en paz. Yo soy una persona honesta, que tuvo que salir de testigo, y ahora me hacen esto. Esta no es la primera vez que entran a mi casa", agregó.
"Yo todo lo voy a presentar como prueba. Tiraban tiros para mi casa, pero es una locura", siguió.
"Uno de los nenes es mi sobrinito y la otra es mi hermana, que tiene 16 años. El nene ahora está estable pero ahora tienen que ver cómo le sacan el perdigón que tiene alojado en el cuello. Al chico le dieron el alta, con el pedigón en el cuello. Mi familia está shockeada, mi mamá no para de llorar. Mi hermana tiene una herida en el muslo izquierdo y mi mamá, ante esto, no para de llorar", remarcó.
"Los policías tendrían que estar para ayudar, ¿me entiende?", concluyó.
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